En la vida vamos marcándo huellas de las que corremos el riesgo de no poder deshacernos, nos puede quedar un agujero; entonces las asumimos como si no quisiéramos cambiarlas, so pena de andar con vacíos extras que no podemos tapar, ni disimular.
Quitarle la mascarada al hueco cuando ya no nos sirve, es dejar de tenerlo tan brillante, tan adornado, pintado, tan asumido, es dejar de velar el agujero mostrándolo obsceno... Cómo deshacerse de una máscara en la que ya no me reconozco, pero que cubre las huellas de mi historia.
¿Qué es mejor entonces, soportar la cicatriz o nunca haberla tenido? Sabiendo que la vida es ir marcándonos huellas, escribiendo nuestra historia; no habrá quien no necesite una máscara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario